Triangulo en el Delta

Dia perfecto para remar, viento en calma, mar en calma, sol en calma.....palistas nerviosos. La semana anterior tuvimos que quedarnos a pie de playa con el equipo a punto para salir, pero el fuerte gregal y las olas considerables hacian una mision imposible intentar tan solo meter la proa en el agua. El sabado en cambio fue otra historia completamente diferente, la salida en pleno Parque Natural del Delta del Ebre hacia que la mañana apareciera expectante de sorpresas, y hubo de todo un poco. El poco fondo por el que se transcurre , siempre inferior al metro de profundidad, y la transparencia de las aguas, hace que la vista se desvie del horizonte al fondo marino en todo momento.
Salimos desde el Barranco del Codoñol en direccion hasta la Punta de la Baña, donde desembarcamos para tomar contacto con la zona protegida de aves y estirar las piernas. Es un arenal que esta en contacto con los dos mares, el interior del delta y el exterior de mar abierto, es una zona de corriente y muy poco fondo. Y desgraciadamente, como toda zona intermedia, llena de restos de la transgresora humanidad.
Salimos pitando ante la agresividad mostrada por algunos insectos autoctonos, para formar el segundo largo que nos dejaria en el merendero flotante donde hicimos honor a aquello de que " lo mas importante en el deporte es la alimentacion", y tomarnos un zumo de cebada fresquito junto a unos mejillones del terreno.
Desde aquí continuamos remando hasta el limite de las Salinas de La Rapita, en un pequeño pinar que delimita el interior del delta con el humedal salino, zona idilica, donde los flamencos pusieron la nota salvaje a nuestra visita. Esta es una zona muy resguardada y protegida, a la que se accede solo por mar y en embarcacion de poco calado, tambien hay una pista de tierra que llega hasta este pinar, aunque me temo que solo para ornitologos o cuerpos de vigilancia.
Despues de comer, hicimos el tercer largo, el que cierra el triangulo, hasta el punto de partida, con garbí de costado y deriva generosa. Un largo muy largo que nos hizo meternos en otro triangulo, este de una regata de vela, sorteando monocascos hasta la llegada a la playa.
Casi 6 horas de visita a golpe de remo, unos 18 km , en una zona de obligada visita por las condiciones que ofrece este parque natural para realizar cualquier actividad relacionada con el mar y complementada con la observacion y la gastronomia. Muy recomendable.

BubbleShare: Share photos - Play some Online Games.