La salida del Sabado era meteorologicamente hablando, una incognita. Mientras unos anunciaban poniente, otros lo hacian por SE y del estado de la mar habia para todos los gustos. Lo mejor, es levantarse temprano, acercarse al mar, e interpretar el tiempo, algo que no todo el mundo entiende pero que el pasar de los años te enseña.
Salimos de la playa sur de Peñiscola con sol filtrado y agua metalica, con buen ritmo de paleo de entre 6 y 7 km/h, viento en calma y un mar que se deja querer. A mitad de camino y a una hora demasiado temprana ya marcaba SE sobre la superficie del agua, algo que indica que el dia no va a acabar bien, como asi sucedió.
La costera por la Serra d´Irta siempre es una salida sensacional, llena de buenas imagenes y naturaleza mires por donde mires; bajo el agua, en los rompientes, en las montañas,...todo te motiva. Hicimos un largo de mas de 15 km sin paradas hasta el faro de Alcossebre y salimos en la cala norte contigua, muy estrecha y con fondo traicionero, solo recomendable por un pasillo de mas de un metro en el lado norte de la cala. Mucha roca y piedra que hacen que se te ponga una cara fea si llevas casco de fibra.
Despues de reponer fuerzas y estirar las piernas salimos ya en medio de una marejadilla consistente y SE marcado para cabalgar por las olas que nos entraban por la aleta y que de un modo u otro y mire por donde se mire hace que los tiempos de navegacion se acorten, ya que la ida estuvo en 2,30 horas, y la vuelta en solo 2. Hizimos parada en cala Pebret apartando a bañistas, esto ya esta a tope, para tomar un poco de fruta y a por el largo hasta Peñiscola.
El tramo final fue a peor, ya que el mar estaba roto, empezaban a marcarse los borreguillos y el fuerte SE nos empujaban a la bocana del puerto. Entramos surfeando sobre las olas controlando a golpe de remo y timon.
Una salida de maraton, con algo mas de 33 km de trayecto y casi nadie en el mar para saludar.
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La costera por la Serra d´Irta siempre es una salida sensacional, llena de buenas imagenes y naturaleza mires por donde mires; bajo el agua, en los rompientes, en las montañas,...todo te motiva. Hicimos un largo de mas de 15 km sin paradas hasta el faro de Alcossebre y salimos en la cala norte contigua, muy estrecha y con fondo traicionero, solo recomendable por un pasillo de mas de un metro en el lado norte de la cala. Mucha roca y piedra que hacen que se te ponga una cara fea si llevas casco de fibra.
Despues de reponer fuerzas y estirar las piernas salimos ya en medio de una marejadilla consistente y SE marcado para cabalgar por las olas que nos entraban por la aleta y que de un modo u otro y mire por donde se mire hace que los tiempos de navegacion se acorten, ya que la ida estuvo en 2,30 horas, y la vuelta en solo 2. Hizimos parada en cala Pebret apartando a bañistas, esto ya esta a tope, para tomar un poco de fruta y a por el largo hasta Peñiscola.
El tramo final fue a peor, ya que el mar estaba roto, empezaban a marcarse los borreguillos y el fuerte SE nos empujaban a la bocana del puerto. Entramos surfeando sobre las olas controlando a golpe de remo y timon.
Una salida de maraton, con algo mas de 33 km de trayecto y casi nadie en el mar para saludar.
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